David sueña con hacerse amigo de Los Billis, una pandilla de niños bien que atemoriza el barrio. Cuando David cree que tiene una posibilidad de entrar al grupo, termina siendo víctima de ellos.
David asiste a su primera fiesta Billis en casa de Leo, pero la rumba se sale de control cuando se inicia un enfrentamiento contra Los Bárbaros, sus enemigos declarados.
Para probar su lealtad, El Indio le pide a David que venda marihuana en su colegio. Mientras trata de lidiar con el riesgo de ser atrapado y expulsado, David decide probarla y es Andrea quien le ayuda a sobrellevar el mal viaje.