Una familia bajo protección de testigos es objeto de un asesino. La detective Liz Nyles investiga una filtración de su unidad a un gángster mientras lidia con problemas familiares con su hija, ex esposo y padre enfermo.
Liz oculta información por miedo. Toma medidas drásticas para proteger a un testigo vulnerable. Mientras tanto, Wheatley y Kelman interrogan al equipo, sospechando de una filtración. Cada miembro se enfrenta a un escrutinio.
Liz busca en secreto al segundo testigo contra el gángster Crowther. Está decidida a relacionar a Crowther con los impactantes sucesos, pero al mismo tiempo teme que su amante, Brandice, también esté relacionada con el gángster.
Liz lucha por descubrir la filtración en el departamento de policía y su posible conexión con el gángster Crowther. Alguien intenta detenerla y el peligro se acerca. ¿Cuánto tiempo podrá seguir investigando antes de que alguien la detenga?
La testigo clave del caso ha desaparecido. ¿Ha huido o ha sido secuestrada? Liz aún no se atreve a confiar en sus colegas. Decide tomar cartas en el asunto, con sorprendentes consecuencias.
Liz está cada vez más aislada. Pero no tiene nada que perder y está dispuesta a todo para descubrir la verdad. ¿Podrá desentrañar la conspiración antes de que las fuerzas corruptas la detengan?