De la tierra hostil al hábitat hospitalario: las primeras especies, como el musgo, los árboles, los insectos y los anfibios, compitieron por la dominación.
Tras la tercera extinción masiva de la Tierra, los antepasados supervivientes de los mamíferos dominaron el supercontinente Pangea. Pero los lagartos pronto inauguraron la era de los reptiles.
Los dinosaurios encontraron su fin con el impacto cataclísmico de un asteroide. Resurgiendo de sus cenizas, las aves se reinventaron en una dinastía de 10.000 especies.
Tras la era de los dinosaurios, los mamíferos pasaron de ser unos desvalidos a convertirse en una potencia mundial, con adaptaciones que cambiaron el juego y conquistaron la tierra, el aire y el mar.